En la actualidad, todos hemos oído hablar del concepto de Cambio Climático. Si consultamos la hemeroteca, tanto científica, como de fuentes no especializadas (prensa, cine, etc.) podemos comprobar como se relaciona este fenómeno con grandes catástrofes a corto plazo debido al aumento masivo de las temperaturas. Es muy fácil también encontrar científicos que afirman que existe el Cambio Climático y que ya está actuando sobre el planeta, aunque es cierto que también encontramos otros investigadores que lo niegan. Con este breve artículo pretendemos dar una idea general al lector sobre el conjunto de fenómenos que componen el cambio climático y como podrían estudiarse con la debida seriedad.
En primer lugar hay que aclarar que este fenómeno global, a escala planetaria, se debe a muchos factores cuya suma podría provocar un cambio en el clima de consecuencias impredecibles. No tiene que ser necesariamente un aumento de las temperaturas, porque también podría dar lugar a una bajada extrema de las mismas. Dependiendo de nuestra latitud y longitud en el planeta podríamos experimentar fenómenos diferentes de temperaturas extremas que no son fáciles de estudiar ni predecir.
Entre estos factores, podemos señalar los más importantes dentro de los que conocemos en la actualidad, siendo probable que no estén todos cuantificados. A continuación, trataremos de explicarlos de una manera breve y sencilla.
- La destrucción de la capa de ozono. Uno de los factores a priori más preocupantes. La Tierra está rodeada de una capa de gases que conocemos como Atmósfera. Esta gran capa se divide a su vez en otras, en una de las cuales se encuentra la archiconocida capa de ozono, que nos protege de las radiaciones más agresivas que alcanzan nuestro planeta provenientes del sol (Ej: la radiación ultravioleta).
Si esta capa se desgasta por la acción de diversos contaminantes que interaccionan con el ozono, puede presentar “agujeros” por los que esta radiación se abre paso hasta la superficie terrestre y provoca diferentes problemas de salud. La capa de ozono tiende a disminuir su espesor para rellenar estos huecos, por lo que podemos ver que esta capacidad de regeneración está limitada a la cantidad de ozono disponible, cuyos niveles fluctúan. A lo largo de la historia, la capa de ozono ha experimentado diversas variaciones en su estado, llegando a tener un desgaste mayor que en la actualidad, lo cual no quiere decir que no debamos preocuparnos.
- El Efecto Invernadero. Otro factor de los más conocidos. Básicamente consiste en que la tierra funciona igual que un gran invernadero, con el consiguiente aumento de temperatura en superficie. ¿Cómo es esto posible? Como ya hemos explicado del sol llega una catidad de radiación a la Tierra. Una buena cantidad alcanza la superficie terrestre, donde parte es absorvida y parte reflejada, de tal manera que se “expulsa” de nuevo. El aumento de contaminantes como el CO2 provoca que haya una nube de partículas que retienen parte de esta radiación, de tal manera que no abandona las capas bajas de la atmósfera. Esto puede dar lugar a fenómenos de cierta importancia y debería preocuparnos, ya que implica un aumento de contaminantes en el aire.
- Problemas en la calidad del aire. La cantidad de emisiones a nuestra atmófera de diferentes sustancias (desde monóxido y dióxido de carbono, CFCs o fluorocarbonos, compuestos de azufre o nitrogenados, SMOG, hasta sencillas partículas sólidas) provoca un deterioro de la calidad del aire que afecta a la fauna, a la flora y al propio ser humano. Es un problema real cuyos efectos tienen graves consecuencias en la actualidad causando enfermedades de distinto tipo, siendo las más evidentes las respiratorias.
- La pérdida de agua y el fenómeno des deshielo. Todos sabemos que el agua es un recurso finito y muy valioso, imprescindible para la vida. Sin embargo, la mala gestión, las alteraciones en el ciclo del agua por causas antrópicas y naturales, la contaminación de los acuíferos y pozos y otros problemas derivados hacen que sea un recurso continuamente amenazado. Por no hablar también del mal estado de mares y océanos, utilizados indiscriminadamente como vertederos por el hombre.
Por otro lado tenemos el fenómeno del deshielo. Todos hemos visto alguna vez la imagen de una gran masa de hielo desprendiéndose al océano, que algunos interpretan como señal indiscutible de que el mundo llega a su fin por una subida del nivel del agua. Es un fenómeno que debe estudiarse con prudencia para poder atajar las causas que lo provocan.
- El último del que vamos a hablar, la desertización y pérdida de cobertura vegetal. Las actividades agrícolas, que en muchos países no tienen ningún tipo de limitación ni control, la mineria, la tala masiva, el pastoreo intensivo, los incendios y otros desastres de diferente índole provocan un deterioro de la cobertura vegetal y un avance de áreas desérticas o semidesérticas. Las consecuencias son evidentes y el peligro que suponen también.
Como hemos visto (y sólo hemos arañado la punta del iceberg) hay múltiples factores que inducen el potencial Cambio Climático cuyo origen se centra en el hombre. Algunos de ellos son díficiles de evitar por nuestro estilo de vida y factores que son ajenos a la Ciencia o el Medio Ambiente, pero otros no lo son por medio de un control y una legislación eficaz. Es indudable que todos los fenómenos de los que hemos hablado tiene un efecto nocivo en mayor o menor medida, pero es más difícil concluir con seguridad que somos capaces de afectar de manera global al clima del planeta.
Espero que este artículo haya resultado interesante al lector y le haya servido para aclarar algunos conceptos o despertar su interés para seguir investigando por su cuenta, no sólo de éste, sino de otros temas, pues la naturaleza y todo lo que la afecta es un asunto de gran impotancia para nosotros. Nos veremos de nuevo en el siguiente artículo.
Escrito por Ícaro.
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